Lima/ Una oportunidad para realizarse como personas, lejos del riesgo de las drogas, el pandillaje y la delincuencia, encontraron 80 niños y niñas procedentes de zonas pobres del limeño distrito de La Victoria que actualmente integran el Coro y la Orquesta Infantil Municipal.
El alcalde Alberto Sánchez Aizcorbe, destacó que si bien esta experiencia es reciente, demuestra que el arte es un mecanismo valioso para prevenir la inseguridad ciudadana.
Comentó que el cambio que está produciendo esta experiencia en la vida de estos menores alcanza a su entorno familiar, que empiezan a cambiar su forma de ver la vida al comprobar que la música les ayuda a ser personas de bien.
Recordó que la conformación de este elenco fue posible gracias al apoyo del reconocido tenor nacional Juan Diego Florez, quien impulsa la conformación de la Orquesta Juvenil Sinfonía por el Perú.
A esta orquesta acceden, luego de una rigurosa selección, los menores con talento y formación musical que procedan de hogares de escasos recursos económicos, tanto de la capital como de provincias.
El proyecto está inspirado en la experiencia de un sistema similar venezolano que lleva más de 36 años de existencia y que ha sido replicado con éxito en más de 45 países.
Los pequeños cantantes y músicos de La Victoria ensayan en el colegio Pedro A. Labarthe de ese distrito, dirigidos por un grupo de maestros que lidera el profesor musical Carlos Ramírez.
“La música es una de las mejores maneras de enriquecer el espíritu. Basta con escuchar y melodías clásicas para darnos cuenta que nuestro organismo alcanza un nivel de paz y plenitud que contribuyen a hacernos mejores personas”, manifestó.
El burgomaestre anunció que la primera presentación oficial del Coro Infantil Municipal será el próximo 23 de setiembre, en una parroquia del distrito.
Estimó que para fin de año hará lo propio la Orquesta Infantil Municipal.
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